El siglo XXI y sus avances tecnológicos han traído muchos cambios en las tareas de nuestra vida diaria. Uno de ellos es cómo llevamos nuestras notas y/o agendas, pues hace muchos años el papel físico era fundamental para registrar fechas, teléfonos, ideas o incluso recibos pendientes.
Hoy en día, este diario puede haber sido reemplazado por celulares y/o computadoras, gracias a aplicaciones, simulaciones e integración de las notas del diario para ejecutar el plan digital.
Sin embargo, hay personas que siguen prefiriendo su papel y lápiz porque les resulta más beneficioso. La escritura a mano lo obliga a reducir la velocidad y abordar su plan con más atención y enfoque. Incluso escribir todo a mano lo ayuda a retener mejor la información, lo cual es una ventaja útil si realmente no quiere perder una fecha límite.
Además, al esforzarte más, te motiva a ser más conciso, y cuando llega el momento de completar tu tarea, marcar «hecho» o marcar provoca una satisfacción más agradable que hacerlo en el móvil, porque puede ser casi como «terminar» una película de Netflix.
En comparación con una agenda digital, una agenda en papel ofrece la posibilidad de mantener todo en un solo lugar, en lugar de pasar de una aplicación a otra. En los teléfonos móviles, puede usar aplicaciones separadas para diferentes propósitos, una para la lista de tareas pendientes, otra para las notas y otra para el calendario.
Entonces, otro beneficio de tener un diario de papel es que puede contener todo en un solo lugar y es casi tan portátil como un teléfono celular.
Otra ventaja es que estás menos distraído, porque demasiado tiempo frente a la pantalla también afecta negativamente a tu cerebro, por lo que la idea de tener un calendario en tu teléfono parece agradable y beneficiosa, pero agrega problemas. Las notificaciones constantes, los recordatorios y las horas extra pueden convertir su ventaja en su desventaja.
Tomarse unos minutos para planificar su día en papel le da un descanso a sus ojos y despeja su mente de la gran cantidad de información que recibimos en nuestras bandejas de entrada y perfiles de redes sociales. Tenemos claro que si bien te puede resultar obsoleto o innecesario, un calendario físico es más útil de lo que crees.
